DÍA 4: Entendiendo el Corazón de Dios

DÍA 4: Entendiendo el Corazón de Dios

Versículo Clave

"Pero Nínive tiene más de ciento veinte mil habitantes que viven en oscuridad espiritual, sin mencionar todos los animales. ¿No debería yo sentir lástima por esta gran ciudad?"

Jonás 4:11

Lectura

"Este cambio de planes molestó mucho a Jonás y se enfureció. Entonces le reclamó al Señor:

—Señor, ¿no te dije antes de salir de casa que tú harías precisamente esto? ¡Por eso hui a Tarsis! Sabía que tú eres un Dios misericordioso y compasivo, lento para enojarte y lleno de amor inagotable. Estás dispuesto a perdonar y no destruir a la gente. ¡Quítame la vida ahora, Señor! Prefiero estar muerto y no vivo si lo que yo predije no sucederá.

El Señor le respondió:

—¿Te parece bien enojarte por esto?

Entonces Jonás se fue al oriente de la ciudad e hizo una enramada. Luego se sentó bajo la sombra de la enramada mientras esperaba ver lo que le acontecería a la ciudad. Ahora bien, el Señor Dios proveyó que una planta frondosa creciera allí y pronto extendió sus anchas hojas sobre la cabeza de Jonás y lo protegió del sol. Esto le trajo alivio y Jonás estuvo muy agradecido por la planta.

¡Pero Dios también proveyó un gusano! Al amanecer del día siguiente, el gusano se comió el tallo de la planta, de modo que se marchitó. Así que cuando el sol se intensificó, Dios proveyó un viento abrasador del oriente para que soplara sobre Jonás. El sol pegó sobre su cabeza hasta que se sintió tan débil que deseaba morirse y exclamó: «¡Es mejor morir que vivir así!».

Entonces Dios dijo a Jonás:

—¿Te parece bien enojarte porque la planta murió?

—¡Sí—replicó Jonás—, estoy tan enojado que quisiera morirme!

Entonces el Señor le respondió:

—Sientes lástima por una planta, aunque tú no hiciste nada para que creciera. Creció rápido y murió rápido. Pero Nínive tiene más de ciento veinte mil habitantes que viven en oscuridad espiritual, sin mencionar todos los animales. ¿No debería yo sentir lástima por esta gran ciudad?"

Jonás 4:1-11

Reflexiona

El capítulo final de Jonás revela un profundo diálogo entre Jonás y Dios. Jonás está enojado porque Dios muestra compasión a los Nínivitas, lo que revela en realidad es parte de nuestro corazón que tiende a no compartir, la compasión y misericordia que Dios ofrece, para que esta humanidad se arrepienta y sean salvos. A través de una planta que crece y muere, Dios enseña a Jonás una lección sobre Su propia compasión por la humanidad. Jonás se preocupa más por su propia comodidad que por las almas de los ninivitas. Esta historia nos desafía a alinear nuestro corazón con el de Dios, a ver a las personas como Él las ve y a extender Su amor y compasión a todos, incluso a aquellos que consideramos enemigos.

Oración

Dios amoroso, ayúdame a entender y reflejar Tu corazón de compasión y amor. Enséñame a ver a los demás como Tú los ves y a extender Tu gracia a todos los que encuentro. Amén.

Preguntas para Reflexionar

  1. ¿Cómo puedes alinear tu corazón con el corazón de Dios, especialmente en cómo ves y tratas a los demás?
  2. ¿Qué pasos puedes tomar para crecer en compasión y amor hacia aquellos que son diferentes a ti o que te han hecho daño?